Con remarcable y tranquilizadora unanimidad sobre el significado del término, los diccionarios definen como ridículo todo aquello que es digno de que uno se ría o se burle, todo lo que merece escarnio, todo lo que mueve a risa, todo lo que se presta a comicidad. Pero en los diccionarios, parece que la circunstancia no exista, pese a que, obligatoriamente llamados a explicar en qué consiste, la denominemos condición en que un suceso tiene lugar, cosa que, entre paréntesis, claramente nos aconseja que no separemos los hechos de sus circunstancias y no los juzguemos sin tenerlas en cuenta.
José Saramago, Premio Nobel de Literatura 1998. Recopilación de entrevistas, declaraciones y pequeños fragmentos de sus libros.
No juzgar los hechos sin tener en cuenta las circunstancias
Fragmento de La caverna
Con remarcable y tranquilizadora unanimidad sobre el significado del término, los diccionarios definen como ridículo todo aquello que es digno de que uno se ría o se burle, todo lo que merece escarnio, todo lo que mueve a risa, todo lo que se presta a comicidad. Pero en los diccionarios, parece que la circunstancia no exista, pese a que, obligatoriamente llamados a explicar en qué consiste, la denominemos condición en que un suceso tiene lugar, cosa que, entre paréntesis, claramente nos aconseja que no separemos los hechos de sus circunstancias y no los juzguemos sin tenerlas en cuenta.
Con remarcable y tranquilizadora unanimidad sobre el significado del término, los diccionarios definen como ridículo todo aquello que es digno de que uno se ría o se burle, todo lo que merece escarnio, todo lo que mueve a risa, todo lo que se presta a comicidad. Pero en los diccionarios, parece que la circunstancia no exista, pese a que, obligatoriamente llamados a explicar en qué consiste, la denominemos condición en que un suceso tiene lugar, cosa que, entre paréntesis, claramente nos aconseja que no separemos los hechos de sus circunstancias y no los juzguemos sin tenerlas en cuenta.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario